¿Por qué no funciona mi compresor de aire?
El recurso definitivo para los problemas de los compresores de aire.
Los compresores de aire son herramientas esenciales que se utilizan en una gran variedad de sectores. Sin embargo, como cualquier otra máquina, pueden desarrollar problemas con el paso del tiempo. Algunas de las dificultades más habituales de los compresores de aire son las averías técnicas, la falta de mantenimiento y la falta de recambios originales.
Solución de problemas de compresores de aire
El mantenimiento de los compresores de aire: prevención y resolución de problemas
Las averías técnicas pueden producirse por distintas razones, entre las que se encuentran el envejecimiento, el desgaste y los daños en los componentes internos. Por ejemplo, la fibra de vidrio y el material de espuma del filtro de aire pueden resultar dañados por factores externos como el aceite, el agua y el calor, lo que provoca un aumento del arrastre de aceite y una disminución de la pureza del aire. Otros errores técnicos son errores con sensores, cajas de engranajes e intercambiadores de calor.
La falta de mantenimiento también puede provocar problemas con los compresores de aire. El mantenimiento periódico es esencial para garantizar que el compresor siga funcionando de forma eficiente y eficaz. Entre estas se incluyen tareas como la comprobación y el cambio de los filtros de aire, los filtros de aceite y los separadores, así como las inspecciones en busca de fugas y otros problemas. Si no se llevan a cabo labores de mantenimiento, el resultado puede ser una disminución del rendimiento, el acortamiento de la vida útil, un mayor consumo energético y una prolongación de los tiempos de avería.
Por último, el uso de recambios no originales también puede causar problemas con los compresores de aire. Los repuestos originales se han diseñado específicamente para su uso con el compresor y se fabrican conforme a estrictas normas de calidad. El uso de piezas no originales puede reducir el rendimiento, aumentar el desgaste e incluso dañar el compresor. Además, el uso de recambios distintos de los originales puede anular la garantía y aumentar los costes a largo plazo.
Además de estos problemas habituales, existen otras razones que pueden provocar un funcionamiento incorrecto del compresor de aire. Por ejemplo, los problemas del sistema de control (p. ej., problemas del regulador) pueden hacer que el compresor deje de funcionar correctamente. El regulador mantiene la presión de la red entre los límites programables cargando y descargando automáticamente el compresor. Si hay problemas con el regulador, es posible que el compresor no pueda mantener la presión correspondiente.
Otra posible causa de un funcionamiento incorrecto del compresor de aire son los problemas con los sensores. El compresor incorpora varios sensores de temperatura y presión y, si una de estas mediciones supera el nivel de parada por alarma programado, el compresor se para.
Además, una instalación incorrecta; condiciones anómalas de temperatura, agua, suciedad o materiales corrosivos; el funcionamiento por encima de las capacidades nominales, y la manipulación del compresor también son otros factores pueden provocar averías o daños.